
Vida nocturna de Tahití
Por supuesto, Tahití no se parece en nada a Nueva York o París, pero aun así tiene vida noctura. En la capital, Papeete, se cena antes de bailar hasta el amanecer. El viernes por la tarde, los tahitianos empiezan a relajarse en las terrazas de las cafeterías, y los bares y restaurantes empiezan a despertar con la puesta de sol, sobre las 18.00.
Una mezcla de gentes, lenguas y sabores que hacen de Tahití algo más que un mero destino tropical.
Cocina de todas partes del mundo
En la plaza central de la ciudad, unas caravanas o «food trucks», sirven platos procedentes del mundo entero. Allí se pueden encontrar especialidades locales reinterpretadas por los distintos grupos étnicos. Este es un ejemplo más de la fusión tahitiana, una mezcla de gentes, lenguas y sabores que hacen de Tahití algo más que un mero destino tropical.


Alta gastronomía variada
En las demás islas, los turistas suelen cenar en los grandes hoteles, donde sirven alta gastronomía variada. Los chefs se basan en una cocina francesa de calidad, utilizando todo tipo de pescado fresco delicioso, con una sencillez al más puro estilo tahitiano, para crear sabores y mezclas que no se encuentran en ningún otro lugar del mundo.